Chevantón, Genio y Figura.

Interesante artículo en el que se demuestra una vez más que Cheva es un futbolista de raza, de los que a mi me gustan. Por Eduardo Florido, Diario de Sevilla.

Chevantón no entiende de diplomacia ni hipocresía. Su explosión de ayer en contra de Iturralde González demuestra que no ha recibido consigna alguna por parte del club para que no critique públicamente a un árbitro que, aunque no es aún oficial, será el que pite la final de la Copa del Rey. Su comparecencia no tuvo desperdicio y puso de manifiesto el estado de rabia que aún siente por el empate en Mallorca. "Estoy amargado y caliente todavía", dijo.

El uruguayo fue muy expresivo y se fue calentando poco a poco. "El penalti a Luis Fabiano lo sentí yo, que era el que había tirado el córner, sentí el golpe. Pero como no sabían qué cobrar, dijeron saque de portería. El árbitro señaló el penalti y después dijo, si cobro penalti se arma, y lo cambió. No sé lo que pasó, sé que hubo tres penaltis que, de jugar el Real Madrid o el Barcelona, seguro que son penaltis, no se lo piensan dos veces".

El atacante sevillista también fue víctima de una falta en el área por parte de Ballesteros y reiteró que aún tenía dañada la rodilla. "Me ha molestado hoy para entrenar y tengo un hematoma. Se la enseñé y me dijo que sólo era un golpe, así que yo le dije que si es un golpe, es penalti".

Además, dejó claro que la fuerza de Madrid y Barcelona se dejó notar, y lo comparó con el gol con la mano de Messi: "Todos sabemos, y va a pasar siempre, que es más importante que gane el equipo grande que otro más pequeño como el Sevilla. Si uno de nosotros marca con la mano, vamos todos presos, todos a la cárcel".

El motivo de su enorme rabia no era otro que su convicción de que el Sevilla es el merecedor del título, algo que ya ve casi imposible. "Con todo el respeto a los otros equipos, si a cada uno le preguntas quién se merece el campeonato, la gran mayoría diría el Sevilla. Sigo pensando que si hubiésemos ganado al Mallorca, estoy completamente convencido de que hubiéramos sido campeones. Ahora, nada es imposible, pero está muy difícil".

Sobre el arbitraje de Iturralde en la final de Copa, expresó un deseo. "Espero que no tenga errores como los que tuvo, respeto a todos y todos nos equivocamos, pero cuando lo hacemos hay que pedir disculpas. Y más cuando no es una vez, sino tres. Con cosas así te tiran todo el trabajo que hicimos durante todo el año, se sufrió mucho y eso te provoca mucha impotencia y rabia", reiteró.

Por último, y tras señalar al Sevilla como claro candidato a la próxima Liga -"será un año como éste, con la diferencia de que la UEFA no la vamos a ganar porque no vamos a estar", señaló entre risas-, habló de su futuro: "Depende del entrenador, de la directiva y de muchas cosas. Sobre la gente, no tengo otras palabras, espectacular el apoyo que me dan, y estoy tranquilo porque en los 900 minutos que he jugado llevo nueve goles, uno por partido. Creo que para lo poco que he jugado, cumplí".